En las elecciones judiciales del 15 de diciembre de 2024, de los 7,3 millones de ciudadanos habilitados para votar, 1,3 millones no acudieron a las urnas, lo que representa un 18% de ausentismo. Según el vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Tahuichi Tahuichi, “De los 7,3 millones de ciudadanos habilitados, 6 millones concurrieron a las urnas, y 1.300.000 no concurrió a las urnas”. Además, destacó que alrededor de 400,000 personas se encuentran inhabilitadas para votar, instándolos a acudir a los tribunales departamentales y al Servicio de Registro Cívico (Serecí) para ser rehabilitados antes de las elecciones generales de 2025.

El proceso electoral incluyó la elección de magistrados y consejeros para el Consejo de la Magistratura y el Tribunal Agroambiental, pero solo en algunos departamentos. Tras la votación, se registraron largas filas en los Tribunales Electorales Departamentales para obtener certificados de impedimento. Tahuichi también resaltó el «quiebre histórico» de esta elección, al indicar que “ha tenido un fuerte peso las redes sociales” y que los votos válidos alcanzaron aproximadamente el 65%, frente al 35% de votos nulos y blancos. Finalmente, advirtió sobre los costos adicionales del proceso y sugirió que se modifique la Ley 025 para evitar una “selección de magistrados más caras del mundo”, ya que el proceso completo ha costado más de 300 millones de bolivianos.