La incertidumbre rodea a la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia
La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb) se encuentra en una situación incierta, a pesar de un convenio para la restitución de su sede. La falta de voluntad política de las autoridades gubernamentales para restituir los derechos de los predios a la activista Amparo Carvajal Baños ha dejado a la institución en un estado de limbo.
H2: El conflicto y la vigilia
El conflicto comenzó el pasado 2 de junio cuando un grupo liderado por Édgar Salazar, afín al Movimiento Al Socialismo (MAS), tomó de manera violenta las instalaciones de la Asamblea. Desde entonces, los activistas de la Apdhb no han podido volver a sus oficinas, a pesar de la firma de un convenio que prometía restablecer la «habitabilidad de la casa y su funcionamiento».
H2: El estado de salud de Amparo Carvajal Baños
La salud de la activista Amparo Carvajal Baños se ha deteriorado debido a la vigilia realizada en defensa de la institución. Las condiciones inhumanas en las que permaneció en la terraza de la Apdhb sin acceso a ningún servicio han ocasionado infecciones en su organismo y la reactivación del cáncer que padecía.
En resumen, la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia se encuentra en una situación incierta. A pesar de un convenio para la restitución de su sede, la falta de voluntad política de las autoridades ha dejado a la institución y a sus activistas en un estado de limbo.
La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia se encuentra en un punto crítico. A pesar de un convenio para la restitución de su sede, la falta de voluntad política de las autoridades ha dejado a la institución y a sus activistas en un estado de incertidumbre. El futuro de la Apdhb y el bienestar de su presidenta, Amparo Carvajal Baños, están en juego. La resolución de este conflicto será un indicador clave del compromiso de Bolivia con los derechos humanos.
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