Marcel Rivas, quien fuera director de Migración, se encuentra en una situación alarmante. Actualmente cumple una huelga de hambre en su celda en la cárcel de San Pedro. La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb) ha alertado sobre su estado crítico. La oposición, por su parte, califica la acción contra Rivas como «criminal», considerándolo un «preso político» del Gobierno de Luis Arce.

Una Huelga de Hambre en Protesta

Rivas, quien no ha consumido alimentos ni agua desde el 26 de octubre, inició una huelga de hambre seca en protesta contra el Gobierno y las autoridades judiciales. Acusa a jueces y fiscales de prolongar injustamente su encierro. A pesar de las prohibiciones, Rivas logró informar sobre su huelga a través de un video grabado desde su celda, lo que ha llevado a Régimen Penitenciario a anunciar posibles sanciones.

Reacciones y Denuncias

La senadora de Creemos, Centa Rek, ha criticado duramente la situación, calificando de «criminal» la acción contra Rivas, especialmente considerando su delicado estado de salud. La presidenta de la Apdhb, Amparo Carvajal, tras visitar a Rivas, compartió un mensaje escrito por él en una servilleta, donde pide ser cremado y solicita cuidados para sus abuelos y mascotas.

Proceso Judicial y Futuro Incierto

A pesar de que en junio de este año se emitió una sentencia de tres años de prisión contra Rivas por incumplimiento de deberes, aún permanece en la cárcel. La defensa de Rivas argumentó que dicha sentencia no implica reclusión, por lo que ha solicitado su liberación. Sin embargo, aún no ha obtenido respuesta.

La situación de Rivas ha generado preocupación y críticas a nivel nacional. Su estado de salud y las condiciones de su detención son motivo de debate y denuncia. Es esencial que se tomen medidas para garantizar sus derechos y se revisen las circunstancias de su encierro.