Fiscalía de Tarija anuncia “sorpresa”. La pasada semana surgieron versiones de que Evo Morales supuestamente acordó con la víctima el cambio de apellido de la niña y que ella habría accedido para evitar su estigmatización.

El Ministerio Público confirmó el lunes que continúa abierto el caso por presunta trata y tráfico que involucra a Evo Morales y a los padres de la víctima. Hasta el momento existen diez cuerpos de pruebas, incluyendo los trámites para el registro de apellido de la supuesta hija que tuvo el expresidente en 2016 con Cindy Saraí Vargas Pozo, entonces de 16 años.

“El hecho de que no todos los días estemos informando las acciones que estamos realizando no significa que estamos dejando el caso de lado. Al contrario, (…) inclusive tenemos información donde establece el grado de familiaridad en cuanto al apellido de Evo Morales. Ya dijimos que seguimos firmes y en cualquier momento vamos a darles una sorpresa a todos”, declaró la fiscal departamental, Sandra Gutiérrez.

La semana pasada circularon rumores de que el exmandatario habría llegado a un acuerdo con la víctima para cambiar el apellido de la niña, y que ella habría aceptado para evitar la estigmatización. La autoridad evitó hacer comentarios, pero sugirió que se investigó la autenticidad del certificado de nacimiento de la niña, nacida el 8 de febrero de 2016 en Yacuiba, y también los trámites relacionados.

Este proceso implica la presentación de testigos y la firma de otros documentos, lo cual ocurrió a partir de 2018, cuando la madre ya había alcanzado la mayoría de edad.

El País