El abastecimiento interno de aceite continúa inestable, por lo que el Gobierno mantiene la suspensión de exportaciones y anuncia un nuevo análisis cuando se normalice el suministro.

El ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, informó que el veto a la exportación de aceite comestible seguirá en pie hasta que se garantice la provisión interna. Pese a la presencia de producto en varios mercados del país, las ciudades de La Paz y El Alto enfrentan escasez y precios elevados. Tras reunirse con la Cámara de Industrias Oleaginosas de Bolivia (Caniob), el Ejecutivo decidió no levantar la medida por el momento.

Huanca pidió “un poco más de paciencia” a la población y anunció una continua verificación del abastecimiento en los próximos días. El viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, añadió que las industrias empezaron a enviar mayor cantidad de cajas a centros de venta y que los controles se mantendrán, con el apoyo de comerciantes y el Defensor del Pueblo. El Gobierno espera el arribo de más de 5.000 toneladas adicionales de aceite para estabilizar el mercado durante el resto del mes.