Durante la madrugada del lunes, el Gobierno firmó un acuerdo con la Federación Regional de Transporte Yungas que permitió suspender el bloqueo de caminos hacia esa región. Como parte del convenio, se abordaron dos de las principales demandas del sector: el suministro de combustibles y la reparación de carreteras. Tras este compromiso, se reanudó la venta de pasajes desde El Alto hacia los Yungas, afectada desde hace una semana.

El conflicto comenzó el lunes anterior, cuando se instalaron al menos seis puntos de bloqueo en la ruta hacia los Yungas. Según los transportistas, la protesta surgió por “el desabastecimiento de combustible y el mal estado de las vías”, lo que provocó fuertes perjuicios a los pasajeros y productores de la zona. Frente a la presión, el Gobierno convocó al sector movilizado para entablar diálogo, y los dirigentes pidieron que la reunión se realice en uno de los puntos de bloqueo.

Finalmente, los ministros Edgar Montaño, de Obras Públicas, y Alejandro Gallardo, de Hidrocarburos, se trasladaron al lugar para sostener la negociación. Como resultado, se alcanzó un acuerdo en horas de la madrugada que puso fin al conflicto. La presencia de ambos ministros fue clave, ya que permitió destrabar el diálogo con los dirigentes y reactivar el tránsito hacia los Yungas, una zona estratégica tanto para el turismo como para la producción agrícola.