El nuevo ministro pidió no estigmatizar a las agencias que vayan a llegar al país para la lucha contra el delito.

La desaparición de material o equipos electrónicos como computadoras en los despachos de los ministros se convirtió en una realidad este martes, cuando el propio ministro de Gobierno, Marco Oviedo dijo que no encontró nada en su oficina. Pese a esas dificultades, la nueva autoridad confirmó el arribo de varias agencias antidrogas, una de ellas la DEA.

“Nosotros vamos a contar con la colaboración de varias agencias de varios países que nos coadyuven a la lucha contra delitos transnacionales y graves, entre ellos, obviamente, está la DEA, están las unidades policiales de la Unión Europea, tenemos convenios con países vecinos, con algunos de sus agregados policiales he conversado esta mañana” informó el titular.

El nuevo Gobierno boliviano ya sentó las bases del nuevo acuerdo con los Estados Unidos, como quitar el requisito de visas para ciudadanos estadounidenses, ayuda económica para la compra de combustible y el retorno de la agencia antidrogas de ese país.
“Nosotros no tenemos por qué aislarnos, no tenemos por qué estigmatizar que venga una u otra agencia, obviamente, tenemos que tener cooperación para recibir, pero también para darla”, justificó el flamante ministro de Gobierno.

Asimismo, coincidió con sus colegas en sentido de que el anterior gobierno dejó las oficinas vacías. En el caso del ministerio de Gobierno, correspondía la entrega al exministro Roberto Ríos.

“No hemos encontrado documentación, no hemos encontrado ni siquiera la instalación de la conexión a la Internet, no hemos encontrado documentos contables, administrativos ni nada por el estilo; no hay una computadora en mi escritorio, no tengo datos, no podía comunicarme con la secretaria, mucho menos con las otras unidades que aplican este ministerio”, se quejó.
Esa misma situación fue descrita en otras oficinas estatales durante el lunes y martes; a las quejas en el Ejecutivo se sumó los reclamos en el Legislativo, donde los diputados oficialistas y opositores no encontraron, en algunos casos, ni los basureros.
\\El Deber//