La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) ha confirmado que la planta de gas licuado de petróleo (GLP) de Senkata en La Paz está operando ininterrumpidamente para garantizar el suministro de cerca de 45.000 garrafas de GLP a la población. Este esfuerzo responde a la necesidad de asegurar el abastecimiento energético en la región, una prioridad para la ANH y el bienestar de los ciudadanos.

La distribución de GLP es vital para miles de hogares en La Paz, donde se utiliza tanto para cocinar como para la calefacción. La ANH ha tomado medidas para que la entrega de garrafas sea eficiente y continua, evitando así cualquier escasez que pudiera afectar a la población.

La planta de Senkata es un pilar en la cadena de suministro de GLP, y su operación 24/7 es un claro ejemplo del compromiso de la ANH con la seguridad energética. Además, la agencia ha implementado un sistema de seguimiento para monitorear la distribución y garantizar que las garrafas lleguen a los puntos de venta autorizados.

Este anuncio llega en un momento crucial, ya que la ciudad de La Paz se prepara para la Feria Internacional de La Paz (Fipaz), un evento que atrae a visitantes y negocios de todo el país y de naciones vecinas. La garantía de abastecimiento de GLP es una señal positiva para los participantes de la feria y refuerza la imagen de Bolivia como un país con una infraestructura energética sólida.

La ANH ha destacado que la colaboración con empresas y organizaciones es fundamental para mantener el flujo de energía. En este sentido, la participación de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca) en la Fipaz es un ejemplo de cómo diferentes sectores pueden trabajar juntos para el desarrollo económico.

La iniciativa de la ANH no solo asegura el abastecimiento de GLP, sino que también apoya la economía local, proporcionando a los productores un precio justo por sus productos. Este enfoque integral es lo que permite a la ANH mantener un alto nivel de servicio y compromiso con la comunidad.

En conclusión, la ANH ha demostrado su capacidad para responder a las necesidades de la población de La Paz, asegurando el suministro de GLP y apoyando el crecimiento económico de la región. La operación continua de la planta de Senkata es una garantía de estabilidad y confianza para los ciudadanos y las empresas que dependen de este recurso energético esencial.