El dirigente de los panificadores de La Paz, Dandy Mallea, rechazó el acuerdo firmado entre la Confederación Nacional de Panificadores y el Gobierno, calificándolo como un beneficio exclusivo para un pequeño grupo que acapara insumos subvencionados. Mallea afirmó que el convenio ignora las necesidades del 70% de los panificadores, quienes carecen de acceso a estos recursos esenciales. Ante esta situación, ratificó que La Paz mantendrá el paro de 72 horas y el ajuste del precio a Bs 1,50 por dos panes.
En una entrevista, Mallea criticó duramente a Rubén Ríos, presidente nacional de los panificadores, acusándolo de no representar al sector. «Es camionero, no panificador, y favorece al Gobierno de turno», señaló, subrayando que La Paz se desmarca del acuerdo alcanzado con las autoridades nacionales. Además, insistió en que el precio de 50 centavos es insostenible sin acceso regular a insumos subvencionados como harina, azúcar y manteca.
Mientras en el resto del país el acuerdo permitió levantar el paro y mantener el precio oficial del pan, La Paz se perfila como la región más crítica, liderada por un Mallea firme en su posición. Este conflicto revela divisiones internas en el sector y plantea desafíos para implementar una solución uniforme.
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