La articulación del XI Foro Social Panamazónico (FOSPA) denunció, mediante un pronunciamiento, que la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM) autorizó “prospección y exploración para actividades mineras” en el municipio de Roboré, en el polígono de Aguas Calientes, colindante con el Valle de Tucabaca, “sin la debida consulta previa, libre e informada a las comunidades, violando sus derechos colectivos establecidos en el artículo 30 de la CPE y poniendo en riesgo su autodeterminación y modos de vida ancestrales”.

“Exigimos la inmediata suspensión de todas las actividades mineras otorgadas en el área denominada Aguas Calientes y la revocación de cualquier licencia o concesión otorgada sea de cualquier índole por haber sido autorizada sin el consentimiento de las comunidades”, indica el comunicado.

A la vez, los firmantes dan su respaldo a la Central Indígena Amanecer Roboré (CICHAR) y a sus comunidades afectadas Yororobá, Quitunuquiña y Aguas Calientes “en su rotundo y contundente rechazo al ingreso de la empresa minera Walfremar SRL y cualquier otra actividad minera”.

El grupo FOSPA reúne a organizaciones e instituciones de la sociedad civil, pueblos indígenas y otros sectores, y se reunió en junio pasado en Rurrenabaque y San Buenaventura para oponerse a la extracción de recursos en la Amazonía.

La representante de Creemos, María René Álvarez, envió una solicitud al Ministerio de Minas y Metalurgia, una Petición de informe escrito (PIE) en el que detalle los criterios con los que espera impulsar la actividad minera en la región.

Señaló que el 8 de agosto de 2023 Walfremar SRL recibió la licencia para operar con 84 redes, afectando no solo a los tres municipios antes mencionados, sino que también lo hizo la Unidad de Conservación de Patrimonio Natural (UCPN) de Tucabaca.

“Estamos ante un nuevo atentado contra nuestros recursos naturales y pueblos indígenas, porque estas concesiones afectan a la UCPN de Tucabaca que tiene importantes recursos hídricos comprometidos y una toma de agua que abastece a Aguas Calientes que puede ser contaminada, además de amenazar al turismo comunitario en Yororobá”, indicó Álvarez.