Los gremialistas de Oruro reportan un alza significativa en el dólar paralelo, que ha alcanzado Bs. 11,35 este fin de semana. Mientras las largas filas por el diésel continúan en las estaciones de servicio, esta escalada en el valor del dólar ha generado preocupación entre los comerciantes e importadores de la región.

César González, secretario ejecutivo de la Federación Sindical de Trabajadores, comentó: “Tenemos conocimiento de que nuestros compañeros importadores (…) han conseguido dólares en 10,20 y 10,40 bolivianos, pero el día de hoy (sábado) inclusive ha llegado a 11,35 en la ciudad de Oruro”.

La información, difundida por el portal RTP, ha llevado a los gremialistas a anunciar movilizaciones “escalonadas y progresivas” para exigir acciones concretas del Gobierno. Los comerciantes buscan medidas coordinadas que mitiguen el impacto de la subida del dólar paralelo.

El Gobierno, por su parte, ha declarado que evaluará posibles “medidas de control” a través de la Autoridad del Sistema Financiero (ASFI). Se esperan anuncios sobre las acciones que se implementarán para frenar el avance del dólar paralelo en Oruro.

Aunque el dólar está oficialmente cotizado en Bs. 6,96 por el Banco Central de Bolivia, esta tasa no está disponible en las casas de cambio, obligando a los importadores a recurrir al mercado paralelo. González advirtió que esta situación es insostenible para aquellos que dependen de la tasa paralela para pagar sus compromisos.

El incremento del dólar a Bs. 11,35 podría tener graves repercusiones en los precios de los productos importados y en los comercios locales que necesitan reabastecer sus inventarios. La disparidad en los precios de compra ha provocado una devaluación implícita del boliviano frente al dólar.

Los gremialistas de Oruro han enviado una carta al Gobierno solicitando un diálogo para buscar soluciones conjuntas. De no recibir una respuesta, planean iniciar movilizaciones progresivas durante la primera semana de agosto.