El expresidente acusa al Gobierno de hundir la economía del país y depender de créditos externos mientras la población sufre por la escasez de alimentos, dólares y combustible

Evo Morales, en plena campaña para consolidar su candidatura presidencial, volvió a cuestionar la gestión de su exministro de Economía y actual presidente, Luis Arce, asegurando que la economía boliviana atraviesa una crisis profunda.

A través de sus redes sociales, Morales denunció que “la economía del país se hunde” y que “el pueblo sufre el castigo del Gobierno”, señalando que el incremento de precios afecta a la población, mientras persisten la escasez de dólares, alimentos y combustible.

El exmandatario comparó la estrategia económica del Gobierno con la de Carlos Mesa, acusando a Arce de convertir al Estado en un “limosnero de créditos y de ayuda internacional condicionada” en lugar de fortalecer la soberanía productiva. También responsabilizó a su exministro de destruir “la patria soberana y productiva que generaba ingresos económicos honestos”.

Morales advirtió que la falta de combustible pone en riesgo la producción nacional y el abastecimiento de alimentos, mientras que el Gobierno prioriza el gasto en publicidad y prebendas para “dominar a dirigentes que no defienden al pueblo castigado por la crisis económica”.

Asimismo, aseguró que Arce ya no puede culpar a bloqueos o marchas por la crisis actual y que “todo el país grita su indignación”.

Por su parte, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, insistió en la urgencia de aprobar créditos bloqueados en la Asamblea Legislativa, acusando a la oposición de frenar los fondos por “caprichos políticos” y llamando a la población a ejercer presión para destrabar los recursos que, según el Gobierno, permitirían aliviar la difícil situación económica del país.

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