Una lluvia persistente desde la noche del martes hasta la mañana de este miércoles generó varios problemas en la capital cruceña. Calles y avenidas se encuentran inundadas, lo que afectó al transporte público con la reducción de micros en circulación y provocó la paralización de vehículos varados en distintos puntos de la ciudad. La situación golpea especialmente a barrios sin pavimento, donde el agua acumulada dificulta el tránsito y expone a los conductores a mayores riesgos.
Los problemas no se limitan a la falta de transporte. Conductores particulares y choferes del servicio público enfrentan contingencias debido a la baja visibilidad, vidrios empañados y fallas en las luces de los vehículos que se dañan por el contacto con el agua. En zonas como el Parque Industrial se reportaron motorizados detenidos a causa de desperfectos eléctricos generados por la lluvia incesante.
De acuerdo con el pronóstico de la meteoróloga Cristina Chirinos, el aguacero se prolongará hasta la mitad de esta jornada con temperaturas entre 19 y 25 grados. El director del Servicio Señor del Clima, Luis Alpire, anticipó que las lluvias continuarán hasta el jueves 2 de octubre, con intensidad moderada a fuerte en gran parte del departamento, lo que incidirá en un marcado descenso de las condiciones ambientales.
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