Desde este jueves, los trabajadores de los hospitales de primer y segundo nivel de Santa Cruz iniciaron un paro de 48 horas en protesta por la falta de respuesta de las autoridades a sus demandas. Esta medida será seguida por otro paro programado para el 30 y 31 de diciembre, lo que dejará a la población sin atención en salud hasta después del feriado de Año Nuevo. Según Daniel Gutiérrez, vocero de la Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública (FESIRMES), la escasez de insumos médicos es uno de los principales factores que ha llevado a esta drástica decisión. “Lamentamos esta medida, pero no hay otra opción ante la falta de respuesta de las autoridades”, expresó.

La situación en los hospitales de Santa Cruz es crítica, ya que, además de la falta de insumos, el paro también afecta el funcionamiento general del sistema de salud. Los trabajadores aseguran que la atención se compromete gravemente debido a estas carencias, lo que pone en riesgo la salud de los pacientes, especialmente en un contexto de alta demanda por emergencias. La protesta ha dejado claro el malestar de los trabajadores del sector, quienes piden apoyo ciudadano y una pronta solución a sus demandas para garantizar la calidad de atención.

Los paros anunciados por FESIRMES afectan directamente a la población que depende de los hospitales públicos. Los trabajadores, ante la falta de respuestas por parte del gobierno, piden una solución urgente a la crisis. “La población se verá afectada en todos los niveles del sistema de salud”, advirtió Gutiérrez, indicando que la escasez de recursos médicos es una situación que requiere atención inmediata para evitar un colapso en el sistema sanitario de la región.