Durante la comparecencia ante los medios en la Casa Grande del Pueblo a las 9:00 am, el Gobierno confirmó una noticia crucial para la estabilidad financiera: el desembolso inmediato de recursos frescos. El presidente Rodrigo Paz anunció que esta misma semana, o a más tardar a inicios de la próxima, ingresarán al país cerca de 550 millones de dólares provenientes de una línea de crédito de la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina). Este monto inicial forma parte de un financiamiento mayor con dicha entidad que asciende a un total de 3.100 millones de dólares.

Más allá de la inyección inmediata, las autoridades revelaron una estrategia de financiamiento internacional mucho más agresiva. Se está gestionando un paquete global con diversos organismos multilaterales que superará los 9.000 millones de dólares. Según las proyecciones presentadas por el ministro Espinoza, se espera que entre el 30% y el 35% de este gran paquete financiero arribe a las arcas nacionales en un plazo de 60 a 90 días. Este flujo de divisas tiene como objetivo primordial reconstruir las reservas internacionales y normalizar la disponibilidad de dólares en el sistema bancario.

Los mandatarios destacaron que estas operaciones son posibles gracias a la recuperación de la confianza en los mercados internacionales, fruto de señales claras como la creación de un viceministerio central y las reformas judiciales en curso. Como prueba de esta mejora en la percepción económica, se informó que el riesgo país ha caído drásticamente en los últimos 25 días, descendiendo de más de 1.000 puntos a cerca de 755. Esta nueva imagen de seriedad fiscal es la llave que está abriendo las puertas al financiamiento externo necesario para reactivar el aparato productivo.