Durante el proceso de inscripciones escolares iniciado el 20 de enero en Bolivia, padres de familia de Santa Cruz han denunciado cobros irregulares. En la unidad educativa fiscal El Retoño A, situada en la zona este de la ciudad, se exige un «aporte anual» de Bs 150 para el registro de los estudiantes. Aunque un letrero en la entrada de la institución menciona los requisitos para el registro, no especifica el monto que se está cobrando, lo que genera dudas entre los padres.

Por otro lado, en la unidad educativa San Francisco de Asís Sur, de convenio, los padres también se han quejado de la solicitud de pagos adicionales. Se les exige un adelanto de seis meses de mensualidad (Bs 25 por mes), junto con un cobro extra de Bs 100 para la compra de impresoras. Además, se les pide que, en caso de estudiantes nuevos, proporcionen un pupitre. Los padres consideran estos cobros como una forma de obtener dinero extra, sin justificación clara.

El Ministro de Educación, Omar Veliz Ramos, ha exhortado a los padres a presentar denuncias formales por estos cobros irregulares. Aseguró que se tomarán medidas rigurosas para proteger el bolsillo de la población y garantizar que las inscripciones se realicen de manera justa y transparente.